jueves, 31 de marzo de 2005

A prueba

Escucha, nunca sabes, si dirán las palabras justas que estabas esperando.
Abre, nunca sabes, si era la persona que siempre soñaste.
Despierta, nunca sabes, si ese día cambiará el resto de tu vida.
Habla, nunca sabes, si tus palabras despertarán sentimientos en personas insospechadas.
Cambia, nunca sabes, si el nuevo camino, te traerá nuevas alegrías.
Analiza, nunca sabes, si la situación que te acongoja, está disfrazada de oportunidad.
Arriesga, nunca sabes, si tus movimientos audaces, serán el comienzo de una cadena de éxitos notables.
Camina, nunca sabes, si tus huellas, serán el camino que sigan aquellos que confían en Ti.
Perdona, nunca sabes, si las ofensas son en realidad pruebas que te ayudan a crecer.
Estimula, nunca sabes, si tus acciones generarán acontecimientos a tu favor.
Agradece, nunca sabes, si lo bueno o lo malo que te sucede, es ni más ni menos, que la señal, de que el Supremo Señor, te está poniendo a prueba.

Decídete a volar

Abandona tu comodidad, enfrenta tus miedos e inseguridades, y sólo así, comenzarás a volar... Si sientes que la vida no tiene sentido, que los problemas te están acabando, memoriza esta parábola: "Un pájaro que vivía resignado en un árbol podrido en medio del pantano, se había acostumbrado a estar ahí, comía gusanos del fango y se hallaba siempre sucio por el pestilente lodo. Sus alas estaban inutilizadas por el peso de la mugre, hasta que cierto día un gran ventarrón destruyó su guarida; el árbol podrido fue tragado por el cieno y el se dio cuenta de que iba a morir. En un deseo repentino de salvarse, comenzó a aletear con fuerza para emprender el vuelo, le costó mucho trabajo porque había olvidado como volar, pero enfrentó el dolor del entumecimiento hasta que logró levantarse y cruzar el ancho cielo, llegando finalmente a un bosque fértil y hermoso". Los problemas son como el ventarrón que ha destruido tu guarida y te están obligando a elevar el vuelo o a morir. Nunca es tarde. No importa lo que se haya vivido, no importan los errores que se hayan cometido, no importa las oportunidades que se hayan dejado pasar, no importa la edad, siempre estamos a tiempo para decir BASTA, para oír el llamado que tenemos de buscar la perfección, para sacudirnos el cieno y volar ALTO y muy lejos del pantano. Abandona la vía segura y cómoda. Lánzate a la ruta incierta, llena de enigmas e inseguridades y hazlo solitariamente. Dios te acompañará y te dirá que camino tomar.
Tomado de www.lotorojo.net

martes, 1 de marzo de 2005

Y que podría ser...

Si todo lo anterior que dije es confuso, esto que escribo ahora parece ser peor...  

¿Podría llamarse traición? ¿o una burla? 

¿Podría ser una mentira? o ¿Tal vez un juego? 

o Simplemente Querer escapar de la realidad Crear una falsa ilusión... 

Pues, es todo junto y a la vez, es mas que eso es haber provocado una Maldad... 

Aunque todo eso haya sido sin intención de que así sea... 

Pues, ya está hecho y ahora, que decir... ¿Acaso pedir perdón? ¿Y existe perdón para eso? 

¿Solo echarse la culpa y ya...? ¿solo así? noooooooooooooooooooooooo 

Pero no se que puedo hacer mucho menos que decir. 

Solo tal vez desaparecer, desvanecerme sin dejar rastros... 

decirle al tiempo que se lleve aquellos malos recuerdos que provoqué.